OJOS QUE HAN VISTO LA MUERTE
Unos ojos me gritan por dentro,
me miran desde el candor,
de la ignorancia del dolor del mundo;
me gritan desde el silencio
ahuyentando el dolor,
ignorando el clamor
de un dios moribundo,
ciego al llanto,
ciego a la vida,
como un verdugo errabundo
enfangado en el quebranto.
Ojos como clavos,
clavos como ojos
que han visto el infierno,
que han visto el fondo insondable
de las tripas del averno.
Que han visto el juego culpable
de un taumaturgo ofuscado.
¿Por qué?.
Parecen preguntar al aire
desde el fondo del abismo.
¿Para qué?.
Alma en blanco,
De inocencia, paroxismo.
Mixtura de congoja,
de amor y miedo;
de alma quebradiza
como una hoja.
Me miran desde el tiempo
removiendo la ceniza
de mi alma exangüe,
de una herida sin sangre
que supura lágrimas de viento
en la insondable oscuridad
de un anochecer de acero.
Clavos clavados en mi mente
que horadan, fieros,
mi ansiedad,
mi miedo.
Ojos de niña,
secos de llanto,
que han visto lo invisible,
que han visto la furia del cielo
desatando tempestades de muerte,
desatando tempestades de fuego.
Caleidoscopio de horror celeste,
de imágenes sombrías;
de unos padres que ya no son,
de hermanos que una vez fueron,
se mezclan en su espíritu mudo,
que recuerda a la agonía
de un amanecer desnudo
del amor de su gente,
del amor de los suyos;
que vagan en la obstinada nube
de un terror que se congela,
del horror que no sucumbe
ante la obstinada estela
de dos ojos en primavera.
me miran desde el candor,
de la ignorancia del dolor del mundo;
me gritan desde el silencio
ahuyentando el dolor,
ignorando el clamor
de un dios moribundo,
ciego al llanto,
ciego a la vida,
como un verdugo errabundo
enfangado en el quebranto.
Ojos como clavos,
clavos como ojos
que han visto el infierno,
que han visto el fondo insondable
de las tripas del averno.
Que han visto el juego culpable
de un taumaturgo ofuscado.
¿Por qué?.
Parecen preguntar al aire
desde el fondo del abismo.
¿Para qué?.
Alma en blanco,
De inocencia, paroxismo.
Mixtura de congoja,
de amor y miedo;
de alma quebradiza
como una hoja.
Me miran desde el tiempo
removiendo la ceniza
de mi alma exangüe,
de una herida sin sangre
que supura lágrimas de viento
en la insondable oscuridad
de un anochecer de acero.
Clavos clavados en mi mente
que horadan, fieros,
mi ansiedad,
mi miedo.
Ojos de niña,
secos de llanto,
que han visto lo invisible,
que han visto la furia del cielo
desatando tempestades de muerte,
desatando tempestades de fuego.
Caleidoscopio de horror celeste,
de imágenes sombrías;
de unos padres que ya no son,
de hermanos que una vez fueron,
se mezclan en su espíritu mudo,
que recuerda a la agonía
de un amanecer desnudo
del amor de su gente,
del amor de los suyos;
que vagan en la obstinada nube
de un terror que se congela,
del horror que no sucumbe
ante la obstinada estela
de dos ojos en primavera.
11 comentarios
Lobo Estepario -
Cinderella -
Xana -
mala -
hasta otra.
mala -
còmo estàs?....
me ha encantado tus poemas, ellos son muy elocuentes de tu buen sentir, y pues plasmas muy bien tus ideas ellas son totalmente abrazadoras de mentes y corazones nobles....cuìdate, shi? un dulce beso lobito y gracias x darme la oportunidad de entrar es esta , tù pàgina, y recuerda nadie es pobre....
:) mas beshitos....q tengas un hermoso dìa, ok? hasta pronto, muacs.
Merrick -
cristal morales -
Amigo es fantastico verte aqui, "suerte"
jorge luis -
Corazón... -
Holas;)
Bueno, bueno por fin he encontrado un lugar maravilloso para llenarme de la poesia...Felicidades la pagina esta muy bien...
Un besote!
;o)
tu ovejita -
esther -